"SI UNA MUJER NO DICE SÍ EXPRESAMENTE, TODO LO DEMÁS ES NO" (Vicepresidenta del Gobierno)
Ni lenguaje de abanicos, ni gestos ni miradas, ni hostias. La herencia de siglos de civilización y de perfeccionamiento de códigos gestuales y corporales están ya tocados de muerte. El último asalto de la querulomanía militante contra el acoso sexual es el desterrar el lenguaje gestual corporal, pero ojo sólo si se trata de mujeres; felizmente los hombres podemos seguir usando la herencia gestual de nuestra civilización y para decir SÍ nos bastará hacer un gesto, una mirada o un suspiro. Sin pretenderlo se está consiguiendo con tanto blindaje para la mujer discapacitarla en sus posibilidades. Al final el único sexo seguro , legalmente hablando , será el que uno tiene frente a su ordenador en el ejercicio de su autoservicio.
